Encuestocracia

Como toda herramienta diseñada por humanos, las encuestas tienen cosas buenas y cosas malas. Entre las cosas buenas está que permiten a los especialistas analizar la evolución de los procesos electorales. Sin embargo ahora cualquier chango marango se saca de la chistera una encuesta para hacer propaganda, ya que se piensa que hay un porcentaje de gente muy ignorante que al no contar con una convicción propia, revisa las encuestas antes de votar y hace más caso a este tipo de información antes de darse tiempo para elaborar su propia y personal decisión.

Si a las encuestas nos atenemos, los gobernadores de Puebla, Oaxaca, Sinaloa y Michoacán serían personas distintas a las que actualmente detentan esos cargos. Sin embargo las encuestan bombardean nuestros sentidos todo el tiempo y hasta un chaparro jocoso nos dice que sólo hay cuatro puntos de diferencia entre candidatos, atendiendo más a una necesidad propagandística que a una necesidad de transmitir información útil.

Mientras haya una gran franja de mexicanos que ya no creen en nada y desconfían de todos los partidos, las encuestas seguirán siendo útiles como arma de propaganda, ya que pueden jalar unos puntitos de la enorme cantidad de "indecisos", y ya se sabe que que en tiempos de gran competencia esos puntitos pueden hacer la diferencia entre la victoria o la derrota en la lucha encarnizada por el poder.

En estos términos habrá que revisar primero que existe un voto duro, es decir la mitad de la población ya sabe por quién votar y no hay forma de modificar sus preferencias, encuestas digan lo que digan, a estos los podemos llamar "los duros".

También hay un porcentaje de personas que no muestran preferencia alguna por alguna de la opciones del mercado electoral, pero si tienen bien definida su aversión por alguna de ellas, a estos los podemos llamar "los blandos".

Hay otro grupo de gente que anda papaloteando entre varias opciones sin tomar una decisión y hasta puede votar en contra de sus intereses ya que busca darle una utilidad a su mísero voto unipersonal, a estos los llamamos "los útiles inútiles".

Y que me dicen de aquellos que de plano tienen en la mente hacerse el harakiri y no votar por nadie, mediante la anulación de su voto, aparte de mostrar su descontento también ayudan al partido que tiene mayor voto duro, a estos le llamaremos "los anulistas inútiles".

Finalmente están aquellos (que no son pocos) que simplemente les vale un pepino esa cosas de las votaciones y que no se paran por las urnas ni por equivocación ya que según sus entendederas eso es cosa de pérdida de tiempo, a estos se le llama "los ausentes inútiles".

¿Indecisos? ¿Inútiles? ¿Anulistas?  ¿Qué más?

Újule hay una variedad de votantes, la imaginación es el límite:

Votantes mapaches, aquellos que votan por otras personas

Votantes acarreados, aquellos que no sabían por quién votar hasta que el mero día de la votación, después de que les dieron los tamales.

Votantes vivos, aquellos que son tan vivos que hsta votan por los muertos.

Votantes traidores, aquellos que reciben la despensa del PRI y luego los canijos votan por otro partido.

Votantes golondrinos, aquellos que votan en Guanajuato pero viven en Querétaro y luego también votan en Querétaro, que no?

Votantes de conveniencia, aquellos que se registran en el D.F. aunque vivan en el Edomex.

Votantes de tradición: aquellos que siempre votan por el mismo partido, porque así lo han hecho por generaciones.

Votantes ingenuos, aquellos que piensan que su candidato va a cumplir las promesas de campaña.

Votantes más ingenuos, aquellos que se creen las mentiras de su candidato y hasta sus propias mentiras.

Votantes ultraingenuos: aquellos que piensan votar por Quadri.

Votantes versátiles: aquellos que tiene el plan A, pero también el plan B y hasta el Plan C.

Etcétera, etcétera. etcétera.

Y bueno los partidos siguen contratando a los encuestadores (con nuestro dinero), sin saber que como le digo a mi compadre Filemón Menchaca: Mire compadre si le tuvo que pagar a la muchacha, eso no le cuenta como conquista, para que se hace tarugo.

Salu2.