El Enemigo

La guerra ha llegado a diferentes lugares del orbe. El siglo XXI había comenzado en calma aparente. Atrás quedaba la Tormenta del Desierto. Sin embargo una mañana cualquiera de septiembre, Estados Unidos de  América al fin pudo encontrar al sustituto de su enemigo. No, ya no era la promesa del soviet de una sociedad igualitaria la que le quitaba el sueño al nuevo imperio. Entonces ante la ausencia de un Dios que intercediera en la palestra de la disputa entre buenos y malos, se inventó el MIEDO. Millones de ciudadanos norteamericanos se tragaron el cuento armamentista de George W. Bush. Se comenzaba a librar la verdadera madre de todas la batallas. El imperio amenazado por los "verdaderos infieles". Los que no creen en el american way of life. El enemigo al que le puedes llamar Bin Laden, que está allá en la montaña como un animal o como un fantasma.

En algunas zonas de México, en este año 2011 la gente está muriendo en la guerra más estúpida de que se tiene memoria desde la guerra de conquista a cargo de españoles que creían ser dueños de la fé y por lo tanto de la verdad. Bueno, sus intereses no eran muy cristianos, pero que caray, la corona española se hizo de tierras, de animales y de personas y de conciencias. Ahora la gente que vive la guerra no sabe si el enemigo es el traficante, el sicario que le sirve, la autoridad que lo reprime, el soldado o el polícia que lo vigila. Sin embargo todos coinciden en algo que si es real: tienen MIEDO. Y no es para menos, la cifra de muertos es espeluznante. Mientras los gringos ponen su granito de arena al latrocinio de forma Rápido y Furiosa, en un escándalo de proporciones mayores.

En Tamaulipas, Cd. Juárez, Durango, Monterrey, Tijuana, Michoacán y en un sinfín de poblaciones, pueblos y rancherías se vive con MIEDO. Como sindróme de la modernidad también al igual que Bush hemos encontrado un enemigo. Algunos le dicen narco, algunos le dicen gobierno, todos le dicen MIEDO.

Ellos (los gringos) tuvieron su 11 de septiembre.  ¿Y nosotros?