Identidad Perdida

No, no es un tema llamativo, se habla poco de ello, tal vez por eso ha prosperado. No sé en que artes, el gobierno federal tramó, licitó y ahora tiene en proceso de implantación un nuevo sistema de identificación de menores de 4 a 17 años. La idea es credencializar a infantes, a título de no sé que necesidad al parecer imperiosa para la nación. Dicen que van a empezar en Tijuana. Y la pregunta que se hace uno es: ¿En que momento perdimos la identidad de los menores?

Dicen que van a tomar las diez huellas digitales, el tufo facistoide es inevitable. El IFAI dijo que tomar el iris era ya un exceso. En mi lejana infancia era suficiente con el RFC, luego vino la homonimia, luego el CURP que poco a poco ha podido funcionar. En fin registros que al parecer no son confiables o no son universales. En otros países el registro de población es sencillo. En E.U.A. es suficiente con el número de seguridad social, en Venezuela les dan a los chicos un número consecutivo y ahí termina el problema, dicho número es individual, intransferible y sobre todo único. Antes te podías identificar con la credencial de la escuela, claro hay muchos chavos que no van a la escuela debido a su pobreza, pero eso sí tendrán su credencial de identidad. Ahora entraremos a un brete para poder constatar meses depués de que el padrón de infantes está disponible en DVD en el barrio de Tepito, al igual que sucedio con el Padrón del IFE. ¿Cuánto va a costar el chistecito? ¿Qué beneficios va a traer a la población? ¿Qué beneficios podrá traer para el gobierno?

Aquí el ABC de mi cavilación sobre el asunto:

A - Este es un negocio más de algunos vivillos que ganaron la concesión del registro, como el asunto de Hildebrando que ha recibido cuantiosos recursos del IFE.

B - La desconfianza, basada en la experiencia nos dice que los datos de nuestros infantes pueden tener un mal uso.

C - Es un trámite más, una fila más, una copia más, una tontería más.

En un país de pobres, el costo del IFE y de los partidos es excesivo, ya no digamos los sueldos de la alta burocracia que parecen similares o de plano superiores a servidores públicos del primer mundo. Este nuevo costo parece insolente, innecesario y de poco provecho para el país.

En fin, la credencial de identidad se asoma como un nuevo dolor de cabeza, donde nadie sabe exponer la relación beneficio-costo de tal entelequía.

¿A favor? ¿En contra? La mejor opinión es la de ustedes ...

Hole, nos muestra la decadencia y la soledad ...